Mood: Amazed
Book: Las enseñanzas de Buda
Music: Silence :)
Este es un borrador que escribí algún día.. de algún año pasado.. posiblemente entre 1997 y el 2001, no le puse fecha porque era un borrador... ya no lo continué.
* El Forastero *
El forastero llegó desde muy lejos, me comentó.
Tenía hambre y sed, así que lo invité a pasar.
Me dio mucho gusto su llegada, aun cuando no le conocía, hace ya más de un año que nadie me visita.
Me platicó que en su tierra natal todo era muy hermoso, que no hacía falta nada, es un lugar de grandes campos y montañas, donde la comida no hace falta y la felicidad es todos los días, vagamente la gente enfermaba, y me dijo también que todos eran muy amables entre sí.
Le comenté que su pueblo sonaba muy chico, inmediatamente me dijo que no.
Me aclaró que había muchos habitantes, todos se conocían y se saludaban con sonrisas radiantes.
Me asombré, se me hizo extraño que en este mundo hubiera gente que todavía haga eso.
Me observó detenidamente, inclinó su cabeza, puso a un lado lo que le ofrecí de comida. Sus ojos brillaban como estrellas en una noche despejada, y dijo: Todos debemos ser así, amables y felices, nos hemos hecho egoístas, sólo nos preocupamos por lo que pasa en nuestro alrededor, y sólo si eso que sucede afecta nuestra esfera de comodidad.
Pasmada, ante un suspiro le dije que apenas si podemos cargar con nuestros pesares, ¿cómo podríamos interesarnos en los de alguien más? Uno no puede andar cargando con cosas de otros por la vida!
¿Es por eso que la gente de aquí es tan cerrada y egoísta? - Me preguntó.. y notando que lo atrapé en la movida, repuse...
- Lo que pasa es... que la vida es cada vez más difícil, el tiempo se nos hace más corto y tenemos menos oportunidades de hacer algo por el prójimo.
- ¿Estás segura?- Me rebatió el punto.
-¡Claro! Yo no salgo a divertirme, mi familia siempre está ocupada, y no tienen tiempo para visitarme, cada vez tengo que ser mejor en mi trabajo, si no llegará otro y me dejará sin comida.
De nuevo sonrió y me dijo - Ya ves? Piensas solamente en tí, y en la gente que te puede destituir, en tu familia.. no piensas que si fueras más abierta y menos temerosa, sería más fácil salir adelante?
-Quizá usted tenga razón, pero de todas formas ¿Cómo dejaría de tener miedo? Eso es, creo yo... inevitable!
- No, no lo es, míreme a mí, salí a conocer nuevas tierras dejando atrás todo lo que tengo, y vine aquí a pedirle un poco de comida, esperando que usted fuera una persona amable, sincera y que no me corriera como varios ya lo han hecho...
- Ha tenido usted mucha suerte, qué si me hubiera encontrado en otra situación, quizá también lo hubiera echado.
- Me asombra que usted misma se quiera convencer de que es una mala persona, no lo haga. A mi no me hará cambiar de opinión, usted va por el camino que debe de ir, y que se preocupe por los demás, y se ocupe de lo que debe de ser me llena de gusto, ahora me despido, le agradezco su hospitalidad.
- ¿ Se va? No me ha dicho su nombre!
- Nos veremos después, se lo aseguro, no necesita mi nombre puesto que ya me conoce.
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